viernes, 30 de noviembre de 2012

Una red de narcotráfico trató de infiltrarse en el Gobierno

EL COMERCIO - Unidad de Investigación – Viernes 30/11/2012

Ya no está en la celda del pabellón San Mateo, donde compartía el baño con otros seis prisioneros. Ahí no había ventilación y el espacio era reducido. Ahora se encuentra en las villas para conductores infractores. Allí tiene baño individual, la alimentación es más sana y sustanciosa. Hasta puede entonar su guitarra.
Las canciones rancheras son sus favoritas. Christian Arana, de 32 años, incluso ha pensado en formar un grupo musical en la cárcel de Esmeraldas.
El cambio de celda se dio luego de que hablara ante los medios de comunicación, sobre las supuestas relaciones que tenía con funcionarios del Gobierno y organizaciones afines.
Arana está enjuiciado por tráfico de cocaína en el caso Resurgir. El nombre es alusivo al operativo que se realizó el 28 de septiembre del 2011. Entonces se encontró más de una tonelada del estupefaciente, en el patio de un inmueble de la parroquia Tachina, en Esmeraldas. Los ladrillos estaban enterrados en 11 cajas.
Según la Fiscalía, la casa fue comprada por Arana pero se inscribió a nombre de Gladis V. La transacción se detalla en el acta de audiencia de sustentación y formulación de dictamen fiscal, N°. 1107-2011, que se realizó el 23 de febrero pasado.
El detenido pagó USD 55 000 por la casa. De ese monto, USD 6 000 sirvieron para levantar la hipoteca que tenía el inmueble en el Banco Nacional de Fomento, según el dictamen.
En el acta constan los testimonios de los vendedores de la casa, quienes reconocieron a Arana y Gladys V. en fotografías que presentó la Policía. Arana reconoció a este Diario que efectuó la compra, pero aseguró que la hizo por pedido de un “amigo cercano”. Se refiere a un supuesto asesor de la Presidencia de la República. “Cómo iba a saber que luego, abusando de mi buena fe, usarían (la casa) para guardar droga”.
Pero la investigación fiscal ubica a Arana como uno de los cabecillas de una red de narcotráfico. En el acta 1107-2011 del expediente se lee: “(…) concertó con los demás coprocesados y efectuó actos idóneos para el tráfico ilícito de drogas, siendo el encargado de obtener la documentación con apariencia legal que le permita exportar la droga camuflada entre mercadería libre y lícita. Para ello, como uno de los más altos líderes de esta organización ilícita, recibieron y mantuvieron en custodia el inmueble que el mismo Arana había negociado a nombre de Gladys”. El registro de compra está certificado en la Dirección de Avalúos y Catastros del Municipio de Esmeraldas.
La función de Arana, junto con otro implicado, Eduardo Cedeño, era “buscar y lograr nexos con autoridades policiales para una… futura vinculación a la misma organización”. Esto consta en el dictamen fiscal acusatorio.